"Porque me duele si me quedo, pero me muero si me voy.
Por todo y a pesar de todo yo quiero vivir en vos"
M.E.W.
viernes, 24 de febrero de 2012
Se despertó temprano y abrió todas las ventanas esperando que el viento la llevara a dar un paseo. Pero no. Seguía allí parada, haciendo equilibrio en agujas de reloj que la amenazaban con no dejar de girar jamás. La asustaba ser presa del tiempo, de haber dado ya su último beso, de no haber aprendido a fabricar la eternidad. Pasó horas tocando la guitarra, buscando un acorde que expresara el silencio. Pasó días dibujando las paredes, queriendo graficar la invisibilidad. Pasó noches bailando, pretendiendo encontrar un paso que reflejara la inmovilidad. Pero tampoco. Frustrada, se dejó caer al abismo, esperando que éste la absorbiera. Pero para su sorpresa, se encontró con el más dulce de los arrullos. Era perfecto. Era todo lo que había deseado. Eterno, silencioso, invisible, la fue acurrucando de a poco hasta dejarla inmóvil. Finalmente cerró los ojos y ya no los volvió a abrir. El viento se la había llevado a dar un paseo.
¿Te acordás de los viejos tiempos? La semana pasada, ayer, ese segundo que acaba de pasar. Todo lo que quedó atrás. A veces, no sé si es nostalgia o pura curiosidad, me dan ganas de mirar para atrás y contemplarlos por un rato, pero enseguida me acobardo. ¿Qué pasaría si al darme vuelta no los encuentro? ¿Y si se marcharon sin que siquiera me diera cuenta? Seguido, lo admito, me asusta pensar en lo que perdí o me falta perder. "Todo está guardado en la memoria" dijo un sabio una vez. Y no se refería al rencor. Eso jamás. En la mía guardo la imagen de nuestro primer abrazo. ¿Eso que querrá decir?
martes, 21 de febrero de 2012
No sé si será el cielo cubierto por las nubes, el nudo que tengo en el estómago o qué, pero encuentro el día de hoy sumamente oportuno para hablar de mi pasado. Una porción en particular de mi más inocente niñez. Mis amigos imaginarios.
Tenía unos cuantos, pero no desperdigados al azar por mi mente. Había tenido la consideración de crear una familia entera imaginaria, para que ninguno de sus miembros estuviera solo. La familia estaba compuesta por Juan, su hermana Dani y la abuela. Juan era mi mejor amigo, a él le contaba absolutamente todo: mis temores, mis sensaciones, mis ideas...Todo. Lo que más recuerdo de Juan era su voz. Tenía una voz muy gastada, como la de un empedernido fumador de hace años (cabe aclarar que Juan tenía la misma edad que yo). Siempre que lo necesitaba, Juan estaba ahí para ayudarme. Ya fuera conversar durante un baño de inmersión, un arrullo antes de dormir, o simplemente un oído fiel a quien contarle mis problemas. Cuando no sabía qué consejo darme, enseguida iba a preguntarle a su abuela. No logro recordar bien cuándo fue que los tres dejaron de visitarme. Quizás fue cuando ese espíritu imaginativo y con ansias de descubrir otros mundos me abandonó por completo. O quizás simplemente se mudaron y no supieron cómo venir hasta mi casa. El problema es que hace días que no puedo dormir pensando en que me gustaría volver a tener eso que fue solamente mío en un pasado lleno de color. Porque no importa los años que hayan pasado, o que todos me digan lo grande que estoy. Yo sigo queriendo imaginar. Juan, esta noche me gustaría escuchar tu voz de nuevo.
sábado, 18 de febrero de 2012
Soy a pesar de mí.
viernes, 10 de febrero de 2012
"¿Sabe usted, señora, cómo se usarán los senos este año?
¿Para dentro o para afuera?"
jueves, 9 de febrero de 2012
Ayer la muerte se vistió de pentagrama y te fue a buscar.
Emocionado e intrigado, estoy segura, decidiste acompañarla, entre melodías eternas que ahora se volvías un mito, junto con vos. Hoy no necesito mirar hacia arriba para encontrarte, sino que puedo elevarme en los aires e ir a buscarte; porque, gracias a vos, ya me convertí en gorrión.
Nos vemos pronto, Flaco.
lunes, 6 de febrero de 2012
De acuerdo. Mañana vas a ser simplemente un recuerdo. Voy a dejar que te lleve el viento mientras cierro las ventanas para no dejarte entrar de nuevo. Le pondré punto final a este capítulo. Guardaré bajo llave todos los poemas que escribí sobre vos, y no tocaré más en la guitarra tu acorde preferido. Mañana me olvidaré del sonido de tu voz y el color de tus ojos. Mañana tendrás un lugar en mi obituario de experiencias pasadas. Pero, si me lo permitís, hoy vas a ser la imagen más presente y hermosa en mi mente, y lo único sobre lo que quiero escribir.
Mira hacia el cielo y sólo hay estrellas. Mira hacia atrás y no encuentra más que sus huellas. Ya no importa si es ayer, hoy o mañana, tampoco importa si es verdad o mentira ...Sólo respirar profundo...
Ahora el viento es su mejor amigo, y las hojas de los árboles, el mejor abrigo. Cierra los ojos y de ellos brotan lágrimas de savia que nutren las flores más bonitas del universo Esas que ella aprendió a plantar.
Se detiene y busca el horizonte con la mirada y allá a lo lejos lo encuentra, éste le estaba sonriendo. La tierra entraba por sus poros y se volvía oxígeno en las venas
Volvió a caminar. Esta vez sin dejar huellas, sin mirar hacia atrás Esta vez, sin volver a ser la que era ...Siempre respirando profundo...