domingo, 25 de diciembre de 2011

¿Réquiem? a una infancia

¿Cuál es el momento idóneo para dejar de decir "cuando sea grande..."?
Una vez, a los tres años, en una sola oración inventé un verbo y un sustantivo; hoy revuelvo en todo mi diccionario por varios minutos para lograr expresar (aunque sea un mínimo acercamiento) todo lo que me pasa adentro, y sólo la menor parte de las veces logro mi cometido.
A los 9 años me regalaron mi primer cuaderno para escribir, y mi primer cuento narraba la historia de un niño que sonámbulo asesinaba a su hermana en nochebuena; hoy me siento osada al escribir sobre una lágrima que cae sobre un pentagrama.
A los 11 años escribía en mi agenda con el abecedario secreto de la Valentina para que nadie pudiera descubrir lo que me pasaba; hoy tengo un blog abierto a todo el mundo en el que trato de volcar (siempre con cierto recato y en la medida de lo posible) un pedacito de mi alma.
A los 13 años me creía una gran conocedora de la vida y sus vicisitudes; hoy me siento más minúscula y perdida que en cualquier otro momento de mi vida. Hoy soy chiquita.

Cuando sea grande, quiero tener la capacidad de ser chiquita de nuevo.

1 comentario:

parido por cande